Aunque ir de compras no sea tu pasatiempo favorito, Harrods es el nombre de los grandes almacenes de Londres que siempre figura en el listado ‘must-see’ (‘imprescindible ver’) de todos los visitantes a la capital inglesa. Harrods son los ‘department store’ más grandes de Europa y venden de todo, desde comida gourmet hasta mascotas exóticas.

Harrods se ubica en el barrio exclusivo de Knightsbridge y entre sus clientes cuenta con los más ricos y famosos entre los cuales podemos nombrar a Oscar Wilde, Charlie Chaplin, Sigmund Freud y muchos miembros de la familia real británica, todos han hecho sus compras en Harrods a lo largo de los años.

 Un poco de historia: su fundador, Charles Henry Harrod, empezó con un negocio pequeño a mediados del siglo XIX. Era una humilde tienda de comestibles en el barrio del East End (el barrio más pobre de Londres). Más adelante trasladó el negocio, que entonces tenía nada más que una sala, al actual barrio de Knightsbridge (una zona muy exclusiva de Londres). Su hijo se encargó del negocio y empezó a ampliarlo. 

El edifico actual, con su cúpula de estilo barroco, se terminó en 1905. Tenía unas de las primeras escaleras mecánicas (escalators) del mundo: tan original y novedoso era este invento que tenían que ofrecer a los clientes nerviosos un coñac cuando llegaban arriba. ¡ja ja!

Hoy en día Harrods tiene 7 plantas y más de 300 secciones diferentes. Hay unas 4000 personas en plantilla.  Incluso tiene su propio lema – ‘omnia, omnibus, ubique’‘all things for all people everywhere’ es decir que puedes encontrar todo lo que necesites en esta enorme tienda. 

En 1995 el hombre de negocios egipcio, Mohammed Al-Fayed compró Harrods. Añadió unos toques personales como The Egyptian Room  (La sala egipcia). Después de fallecer su hijo, Dodhi Al-Fayed, junto a la princesa Diana en un accidente de coche en 1997, Mr. Al–Fayed creó un monumento en su honor dentro de Harrods (un lugar muy visitado). Además, hizo algunas declaraciones sobre las circunstancias de sus muertes y la familia Real británica y, por último, en el año 2000 quitó las garantías reales indicando que la familia real compraba allí; al duque de Edimburgo le vetaron la entrada. En el 2010 Al-Fayed vendió la tienda al estado de Catar.

Por supuesto que Harrods es muy caro y muy turístico pero sus escaparates (shop Windows) son obras de arte e ir a verlas ¡es gratis!

Keep on learning English with Talking with Cambridge House and visit Harrod’s next time you are in London!